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Mejora la velocidad de tu web

Optimiza la velocidad de carga web y olvídate de los tiempos de carga largos y tediosos.

El dedicar tiempo a mejorar la velocidad de carga de tu sitio web solo tiene beneficios para ti, tu web y tu marca. Hay varios pasos que puedes implementar para optimizar la velocidad de tu web. No te queremos agobiar con demasiada información, así que compartiremos nuestros consejos favoritos sobre cómo mejorar el tiempo de carga web para ayudarte a que tu web se cargue más rápidamente.

La razón más importante para querer tener una web de carga rápida son tus visitas. Si tu web es rápida, tendrá más posibilidades de posicionarse mejor en Google. Cuanto mejor te posiciones en el motor de búsqueda, más visitas tendrás. 

¿Qué es la velocidad web?

La velocidad web es el tiempo que tarda tu sitio web en cargarse. En concreto, el tiempo que tarda el contenido del sitio web en descargarse del servidor de hosting o alojamiento web. Es importante ir a por una velocidad de carga web más rápida. Una buena velocidad de página web debería ser inferior a 2 segundos. Toda la página debería haberse descargado con éxito en esos 2 segundos. Con esto, te aseguras de que tus visitas no tengan que esperar, ofreciéndoles la mejor experiencia a tus usuarios. 

¿Cómo afecta la velocidad de una página web al SEO?

Google decidió en 2018 que la velocidad de carga de una página web pasaría a ser un factor importante en el posicionamiento de las búsquedas desde dispositivos móviles. Sin embargo, las búsquedas móviles no son el único factor decisivo para el posicionamiento en Google. El rendimiento de tu sitio web en un navegador también es fundamental. 

No podemos dejar de insistir en la importancia de la optimización de la velocidad de carga para los usuarios de teléfonos móviles. Hoy en día, la mayoría de las personas navegan por Internet desde sus teléfonos móviles o desde sus dispositivos inteligentes. Por lo tanto, garantizar que la velocidad de carga de la página esté a la altura de las expectativas de estos usuarios es vital. 

Elimina la necesidad de redigirir  tu tráfico a una versión móvil de tu sitio web con un diseño responsive (o adaptable). Hoy en día, la creación de experiencias multidispositivo es más fácil que nunca con un diseño responsive. Este diseño evita la necesidad de redirigir a los usuarios desde la versión de escritorio de tu sitio a una optimizada para móviles.

Las personas que navegan en sus teléfonos móviles tienen escasa capacidad de atención y poca paciencia. Además, el diseño de tu sitio web no debe perderse ni verse comprometido en la optimización de la velocidad. Si tus visitas no encuentran el diseño de tu sitio web atractivo, pueden marcharse y no volver.  

Si tienes en cuenta estos aspectos y mejoras la velocidad de carga web para teléfonos móviles, lo más probable es que el número de tus visitas aumente. Recuerda que los usuarios de teléfonos móviles navegan por Internet en todo momento, ya sea en el tren, en un restaurante esperando, o simplemente en casa relajándose en su sofá.

Test de velocidad web

Lo primero que debes hacer es hacer un test de velocidad web de tu sitio. Lo puedes hacer yendo directamente al test de velocidad web de Google, Google page insights. Una vez allí, simplemente escribes la URL de tu web, y esperas los resultados. La herramienta te dirá, en unos pocos segundos, la velocidad de carga de tu web tanto en dispositivos móviles como en ordenadores de sobremesa. Los resultados pueden situarse entre 0 y 100. Si la velocidad de tu sitio web está entre 0-49, necesitas optimizar la velocidad de tu sitio web inmediatamente. Si está entre 50-89, no es terrible, pero necesitas aumentar la velocidad de carga de tu sitio web. Ahora bien, si los resultados muestran 90-100, entonces ya tienes una buena velocidad web. También puedes utilizar esta herramienta para comprobar el sitio web de tu competencia y ver cómo es el rendimiento y los resultados de su sitio web. 

En resumen, Google recompensa a los sitios web de carga rápida, y eso es algo que debes tener en cuenta en todo momento.

¿Cómo aumentar la velocidad de carga web?

Aumentar la velocidad de tu sitio web conlleva toda una serie de beneficios. De las nuevas visitas que hacen clic en tu sitio, pocos se irán: ¡un retraso de un segundo provoca una caída del tráfico! Y no solo eso. Se ha informado ampliamente de que una web de carga rápida también produce mejores ingresos en el comercio electrónico. Además, una rápida velocidad de carga web da lugar a una mejora en la participación de los usuarios. 

Aumentar la velocidad de tu web, como muchas cosas, es una suma de pequeñas mejoras. Pero antes de empezar, haz una copia de seguridad de tu web actual: nunca se sabe si hay dependencias ocultas.

Vamos a repasar los aspectos vitales que debes considerar para mejorar la velocidad de tu página web.

  • Hosting o alojamiento web

Asegúrate de tener un proveedor de hosting fantástico, ya que un buen alojamiento web es donde comienza el rendimiento de tu web. Confirma que tienes el hosting correcto y el tipo de hosting adecuado. Hay varios tipos de alojamiento web disponibles. No tener un buen hosting impactará negativamente en tu web.

  • Tiempo de respuesta del servidor

El tiempo de respuesta del servidor de tu sitio web se ve afectado por la cantidad de tráfico en línea que tienes, el número de solicitudes que recibes y los recursos que utilizas. En consecuencia, tu tiempo de respuesta afectará a la velocidad de tu web. Busca todo lo que pueda afectar al tiempo de respuesta de tu servidor y resuelve los cuellos de botella.  

  • Comprimir archivos

Comprimir tus archivos permite mejorar el rendimiento de tu web. Puedes utilizar Gzip, que es un software de compresión, para comprimir tus archivos. Los archivos de más de 150 bytes pueden ralentizar el rendimiento de tu sitio web, y Gzip puede comprimir archivos JavaScript, HTML, etc., para reducirlos a menos de 150. 

Puedes realizar primero una auditoría de compresión para ver cómo puede afectar esta compresión a la velocidad de tu web, para luego proceder a comprimir y mejorar. 

Además, deberías minimizar el tiempo hasta el último byte. Una pregunta que debes hacerte es cuánto tarda tu página en cargarse y cuánto tarda en iniciar el proceso de carga propiamente dicho. 

  • Optimiza tus imágenes 

Las imágenes ocupan mucho espacio cuando tu página web se carga, así que asegúrate de que no sean innecesariamente grandes. Sitios como Canva te ayudan a reducir la resolución y a aumentar la compresión de tu imagen manteniendo la nitidez para tus visitas. Por ejemplo, el ancho de los artículos de nuestro blog es de 732px, por lo que todas nuestras imágenes se redimensionan para que se ajusten perfectamente a esa dimensión, de modo que el tiempo de carga se reduzca al mínimo.

  • Minimiza tu código

Los comentarios y los espacios son los pilares del desarrollo web. Mejoran la legibilidad y proporcionan documentación para futuros cambios, lo cual es estupendo, salvo que se trata de datos innecesarios que tienen que ser servidos durante el tiempo de ejecución. Los servicios de minimización, como el de Will Peavy, eliminan estos comentarios y espacios superfluos, ahorrando un espacio precioso en los archivos finales que se sirven y renderizan.

  • Pon tus etiquetas CSS en la parte superior, y las etiquetas Javascript en la parte inferior

En general, las declaraciones CSS deben ir lo más arriba posible, ya que la mayoría de los navegadores no interpretan las páginas hasta que no se cargue el CSS, lo que evita que el sitio web parpadee mientras se cargan las hojas de estilo.

Sin embargo, en lo referente a Javascript, es mejor mantenerlo lo más abajo posible, ya que los navegadores no analizan ningún código que venga después, hasta que los scripts estén cargados y completados. Por lo tanto, querrás que los elementos visuales estén donde tienen que estar mientras se carga el Javascript.

Además, carga tus archivos JavaScript de forma asíncrona y no sincrónica. Esto es para asegurarte que, al menos, algunos de tus archivos se cargan simultáneamente en lugar de uno a la vez.  

  • Utiliza una CDN

Una Red de Distribución de Contenido (CDN por sus siglas en inglés) es un sistema de servidores distribuidos por el mundo que entregan contenidos a los usuarios para optimizar el rendimiento. Esto significa que si utilizas una CDN, los archivos se servirán a tus usuarios desde las ubicaciones de servidores más cercanas a ellos. Esto reduce la carga en cualquier servidor individual, mejorando la experiencia de tus usuarios.

  • Reduce los redireccionamientos y los scripts externos

Cada vez que compartes un enlace en tu contenido, tus visitas deben esperar a que ese enlace se cargue. Los redireccionamientos son geniales, pero recuerda reducir la cantidad que tienes en tu sitio web. Además, ten en cuenta que cuando redireccionas, lo haces a otra web, y no sabes cuán buena es su optimización de la velocidad web. 

También te aconsejamos que reduzcas tus scripts externos. Es posible que, sin saberlo, tengas integraciones de terceros en tu sitio web, y estas ralentizan la velocidad de carga de tu web. 

  • Caché del navegador

La caché es genial. Guarda la información, como las imágenes, y la almacena como un tipo de memoria para que cuando tus visitas decidan volver a visitar tu sitio web, tu página no tenga que recargarse de nuevo, lo que se traduce en eficiencia y fluidez. Si no activas la caché, una página tiene que cargar hasta 30 componentes cada vez que el mismo usuario vuelve a visitar tu web, y eso puede llevar más de 2 segundos. 

La velocidad de carga de tu página es vital (en ordenadores de sobremesa y en teléfonos móviles), y es algo a lo que deberías dedicar tiempo para mejorar. Solo te reportará beneficios y te ayudará a promocionar tu marca y a mejorar la experiencia de tus usuarios.